¿Te preguntas cómo es Ibiza en Navidad? Imagina que paseas por playas solitarias y que caminas de costa a costa disfrutando del paisaje en días soleados.
Imagina que después vas a comer un delicioso ‘bullit de peix’ junto al mar en mangas de camisa y que te abrigas cuando empieza a anochecer.
En diciembre las puestas de sol son espectaculares en muchos rincones de la isla y se viven con mayor intensidad, con el Mediterráneo en todo su esplendor.
El invierno es tiempo para descansar, para disfrutar de las bellas casas payesas, de su arquitectura y de sus fantásticas chimeneas, que nos aportan calor de hogar.
Aprovecha para recorrer los pueblos del interior de la isla, escuchar su calma y descubrir su historia.
No dejes de probar auténticos manjares como el ‘sofrit pagès’ o la ‘salsa de nadal’ en restaurantes con encanto, que en Navidad son alegres y entrañables.
Imagina que vas de compras a tiendas singulares, que visitas mercadillos y asistes a conciertos donde te encuentras a gente de todas partes del mundo que huyen de la vulgaridad.
Un lugar para aislarte o para conectar. Una isla para vivir la magia de la Navidad o para crear tus propias experiencias.
Ibiza, más que nunca, es un paraíso en Navidad: el lugar perfecto para empezar con energía y buenas vibraciones el nuevo año.
En familia, en pareja, con amigos o con ganas de abrir nuevos horizontes: Ibiza te espera, también en Navidad.