La isla de Ibiza cuenta este verano con nueve banderas azules, dos más que en la temporada de 2018, ya que ha recuperado las del Port de Sant Miquel y la de la Playa de Santa Eulària.
Además también lucen este distintivo las playas de Es Figueral, Cala Llenya, Cala Llonga y Es Canar, todas en el municipio de Santa Eulària des Riu, así como las de s’Arenal Gros de Portinatx, Benirràs y Cala de Sant Vicent, en el municipio de Sant Joan de Labritja.
La Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac), otorga las banderas azules a aquellas playas que cuentan con una calidad excepcional, tanto en servicios como en limpieza.
Velar por el cuidado de las playas, y disfrutar de ellas sin repercutir en su belleza y entorno, son las premisas del Consell de Ibiza que impulsa la campaña “A la playa en autobús” para no saturar estos espacios y facilitar el acceso en casos de emergencia. Por eso son ya son un total de 30 las playas de la isla que están conectadas, y a las que se puede acceder en transporte público, descongestionando estos espacios tan codiciados en la temporada estival. Casos como los de la playa de Benirrás los domingos, donde solo puede accederse en autobús, y Cala Salada, cerrada al tráfico toda la temporada, son ejemplos de cómo este transporte público es el mejor medio para disfrutar de las costas de Ibiza.
Con 210 kilómetros de litoral y 50 playas, el objetivo del Consell de Ibiza, encargado de la gestión del transporte público y de su promoción, es seguir extendiendo el programa ‘Playas Conectadas’ a aquellas que cuentan con más afluencia de visitantes, para que la isla siga manteniendo una naturaleza y unos paisajes cuidados y mínimamente alterados, sin renunciar a poder disfrutar de ellos.