Escuchar a la tierra, cultivarla, amarla y respetarla deberían ser algunas de las premisas que tendríamos repetirnos cada mañana. El cuidado de un entorno privilegiado como el que posee Ibiza, aprovechando los frutos y elementos que nos da pero velando porque se mantengan en armonía, es preciso para que una isla valorada por su alto nivel patrimonial en cuanto a flora y fauna, tanto terrestre como marina, se mantenga. Además, si escuchamos bien y estamos atentos a lo que nos regala, podremos encontrarnos con auténticos tesoros destinados, incluso, a mejorar nuestra salud.

¿Sabíais que en la isla hay una gran variedad de plantas con las que desde hace siglos se han combatido enfermedades y aliviado distintas dolencias o molestias digestivas?

Muchas de ellas están al alcance de todos y crecen de forma silvestre y en abundancia. Pueden usarse en platos, como ungüentos, en aceites o en infusiones y su uso correcto puede mejorar el estado de nuestra piel y de nuestro organismo. La tierra fértil y arcillosa de Ibiza es ideal para quienes decidan montar su pequeño huerto medicinal en casa con el que tratar y prevenir molestias comunes y dar vida a deliciosos platos con sello de la isla.

Romero

Un claro ejemplo de los regalos que nos da la flora mediterránea es el romaní ibicenco, más conocido como romero (Rosmarinus officinalis), que cuenta con múltiples propiedades antiinflamatorias y que, además, mejora la circulación. Una planta que de consumirse en infusiones, decociones o usarse mediante friegas si se destila con alcohol. En la cocina es una aromática perfecta para condimentar vegetales, pescados o dar un aroma distinto a los deliciosos aceites propios de la isla.

Frígola o tomillo

No podía faltar en esta lista la frígola o tomillo (Thymus vulgaris, Lamiaceae), una especie autóctona de la isla que se presenta como un excelente remedio para el asma leve o principios de bronquitis. Suele mezclase con miel para combatir la tos, y su sabor mejora mucho si lo combinamos con regaliz.  También es una planta conocida por sus cualidades digestivas y antisépticas. Se puede consumir en infusión, en postres y da nombre a una de las bebidas más reconocidas de Ibiza.

Fonollo o hinojo

Otra planta que podemos encontrarnos en el campo o en cualquier espacio verde es el fonollo o hinojo, también conocido como hierba santa, (Foeniculum vulgare ) cuyas semillas son muy valoradas por las madres lactantes, puesto que afirman que aumenta el flujo de leche materna, y que tiene propiedades calmantes y diuréticas. Es un excelente remedio para el mal aliento y su uso en platos de cuchara está muy extendido porque contribuye a que potajes o pucheros sean más digestivos.

Aloe Vera

Otra variedad cada vez más extendida de Ibiza, aunque proviene del Norte de África, es el Aloe Vera (família: Liliaceae). Esta planta tiene numerosas propiedades curativas y puede utilizarse como producto de belleza o, incluso, como potenciador del sistema inmunológico, así como de remedio para los problemas gastrointestinales. En gel tiene efectos cicatrizantes y ayuda en la eliminación de las estrías ya que es un antiséptico natural. Además, actúa como calmante ante las quemaduras del sol y puede aplicarse directamente sobre la piel. Preparar una crema para el rostro con sus hojas es muy sencillo, solo es preciso cocer la pulpa de sus plantas en agua y mezclarla con cualquier aceite puro, ya sea de oliva o de coco.

En la cocina puede usarse para confeccionar una limonada fresca que combinada con lima y jengibre resulta muy sana y deliciosa.

Tomaní o lavanda

Terminamos este repaso con la paz que nos da el tomaní o lavanda (Lavandula, Lamiaceae) que en las islas está presente en las especies Lavandula dentata y la Lavandula stoechas. Puede tomarse como relajante en infusión, usarse como aceite esencial calmante, para aliviar el estrés, o incluso como remedio para dolores de cabeza o sinusitis mediante inhalaciones. Hay quienes lo usan como desinfectante y cicatrizante en pequeños cortes, quemaduras o picaduras de insectos.

En la cocina puede combinarse con hinojo y orégano en platos como la pasta o las verduras.