Rodeada por el Mar Mediterráneo, la isla de Ibiza cuenta en sus aguas cristalinas con una gran variedad de especies marinas que se convierten en protagonistas de platos ibicencos como el bullit de peix o la frita de pulpo. Uno de los manjares más exquisitos y menos conocidos de la cocina tradicional ibicenca es la borrida de rajada, un guiso elaborado con raya, un pescado blanco que resulta tener un alto valor nutricional por su escaso contenido graso y su aportación moderada de proteínas.
Así, este plato local es un gran desconocido por muchos y cuenta con un sabor y textura únicos que resulta ideal para mayores y pequeños. La borrida de rajada ibicenca se cocina, además de con raya como ingrediente principal, con patata y con almendra, este último como condimento tal y como se hacía en la Edad Media.
Se trata de un delicioso plato de la cocina ibicenca que solo elaboran en los restaurantes más auténticos que preparan platos marineros cómo antiguamente. Se ha de cortar el pescado en rodajas grandes, salar y dejar reposar una hora; después se pelan y se cortan las patatas en láminas. El siguiente paso es colocar en capas alternas la patata y el pescado en una cazuela, a continuación, se añade huevo duro, ajo, perejil y almendras, todo bien picado. Se condimenta todo con aceite, pimienta y sal, para después cubrir con agua y dejar cocer a fuego lento hasta que esté listo para degustar.
La borrida de rajada es una receta con la que sumergirse en la verdadera gastronomía ibicenca, un plato que por su calidad y delicadeza resulta irresistible.