Los vuelos directos desde la isla blanca a diversas ciudades españolas y europeas se mantienen durante todo el año.
Ibiza es una ciudad multicultural que cuenta con una alta afluencia de gente de todos los rincones del mundo que llegan hasta la isla para descubrir su magia, su cultura, su gastronomía y sus parajes naturales. En este sentido, cada vez más son más los visitantes que viajan hasta Ibiza fuera de temporada y, por ello, esta demanda en aumento ha supuesto que también amplíen las conexiones directas a la isla, tanto desde Europa como desde el territorio nacional en meses como enero, febrero, marzo o abril.
Actualmente existen un total de seis destinos que cuentan con vuelos semanales directos a Ibiza: Londres, Eindhoven, Ginebra, Milán, París y Ámsterdam. A estas ciudades se suman otros rincones de Europa que, a partir del mes de abril, también permiten desplazarse en avión directamente a Ibiza como son Düsseldorf, Roma, Mánchester, Bolonia, Turín, Bristol, Dublín, Bruselas, Marsella, Venecia o Zúrich.
Este crecimiento del número de vuelos ha supuesto una mejora que beneficia tanto a los residentes que quieren conocer en un fin de semana, o durante varios días, algunas de estas ciudades, como a los turistas que desean descubrir la isla sin aglomeraciones, aprovechando las suaves temperaturas que predominan en Ibiza durante todo el año.
Asimismo, toda la historia, la cultura y la tradición ibicencas están al alcance de los turistas nacionales. Las ciudades españolas conectadas directamente con la isla son Valencia, Barcelona, Alicante, Madrid, Palma de Mallorca, Málaga, Bilbao y Sevilla.
Los vuelos directos a estas ciudades dan la posibilidad de nuevo a turistas de la península buscar sol y playa fuera de temporada y, por su parte, otorga a los residentes en la isla poder viajar, con el descuento correspondiente, a otros rincones de España.
Viajar es un regalo, es una oportunidad para conocer otras culturas y también para mostrar a los turistas la historia y las costumbres isleñas que convierten Ibiza en un enclave único que es maravilloso en cualquier época del año.