Parece imposible imaginar una Navidad sin villancicos, o al menos, tal y como los conocemos ahora. Si bien en Ibiza, como en cualquier parte del mundo, no es extraño toparse en Navidad con alguna muestra de estos cancioneros, tradicionales y modernos, tampoco lo es encontrar una muestra de Caramelles.
Este es, sin duda, uno de los ritos más antiguos de la cultura popular de Ibiza. Se trata de un canto ancestral, cuyos orígenes se remontan a la Edad Media y que describe el nacimiento de Jesucristo, acompañado de un tambor, de un espasí (una espada metálica que se utiliza de base para conseguir sonidos de percusión), de una flaüta (la flauta típica de la isla, de madera) y de castañuelas.
Por su naturaleza religiosa, es normal que todas las parroquias de la isla ofrezcan la oportunidad de escuchar una muestra de esta música al menos en una ocasión durante la época navideña. Y es que, aunque existen variantes, las letras se basan en antiguos textos bíblicos, que han ido transmitiéndose de generación en generación, de boca a oreja, y que hoy, algunos estudiosos de la música y de la cultura ibicencas, han recogido, unificado e impulsado, a través de grupos de folclore local.
Por todo ello, el año 2005 el Consell Insular d´Eivissa impulsó su declaración como Bien de Interés Cultural de Carácter Inmaterial, BIC, lo que propició que la misma institución se encargara entonces de la grabación y de la difusión de estas canciones tradicionales.