Son muchos los cineastas que han querido captar el encanto de Ibiza.
La isla protagoniza decenas de películas que han inspirado a directores de todo el mundo durante décadas como José María Forqué en 1966, al amparo de La muerte viaja en baúl, o Blake Edwards, quien ubicó en Ibiza algunas de las escenas de Tras la pista de la Pantera Rosa. Julio Médem dio vida aquí a su Caótica Ana, mientras que Günter Schwaiger presentó Ibiza Occident, en clave mediterránea. En este artículo queremos rendirles homenaje a todos ellos y trasladarnos al mítico “acción”, repasando los principales escenarios de película para quienes deseen visitar la isla y quieran conocer algunos de sus rincones de cine.
Uno de los largometrajes más populares y que mejor retratan la isla es More, de Barbet Schroeder. Una cinta que logró difundir en 1969, especialmente en Francia y en Alemania, la icónica imagen de la isla más hippy y libre. Su banda sonora corrió a cargo de Pink Floyd y se rodó en algunos de los lugares más emblemáticos de la isla como Es Vedrà, un islote inhabitado, envuelto en leyendas, que cuenta con casi 400 metros de altura y que puede avistarse desde la playa de Cala D´Hort.
Otra de las películas rodadas en Ibiza que fue todo un éxito en taquilla, especialmente en Holanda, es la cinta Verliefd op Ibiza (Loving Ibiza) grabada en 2013. Esta comedia romántica relata las aventuras cruzadas de varios personajes residentes y turistas de la isla. Un largometraje que fue grabado en rincones como Platges de Comte y que refleja a la perfección el buen ambiente que se respira en esta playa que destaca por la tonalidad turquesa de sus aguas y por su preciosa puesta de sol.
Y de la comedia familiar nos vamos al cine de terror. La película ibicenca Los crímenes del Día de Todos los Santos, de Héctor Escandell y Vicent Torres, realizada en 2016, nos traslada a 1971 para relatar el hallazgo de distintos restos humanos encontrados en el torrente de Sant Miquel de Balansat. Esta “sangrienta” cinta se rodó, además, en distintas localizaciones de la cara más verde de Ibiza: Sant Joan de Labritja.
En esta lista no podía faltar Aislados, del director ibicenco David Marqués, rodada en 2005 íntegramente en la isla y que relata la historia de Adriá y de Kike, dos amigos que descubren durante su estancia en la casa de un amigo en paradero desconocido, quiénes son y por dónde ha transitado y transitará su camino. Santa Agnès de Corona o el puerto de Sant Antoni de Portmany, son los principales escenarios de esta comedia vestida de humor negro.
Y terminamos con una película rodada el pasado año: Un verano en Ibiza, de Arnaud Lemort. Este comedia de origen francés cuenta las desventuras de una familia que pasa sus vacaciones en la isla. Al estar grabada por completo en Ibiza son muchos los paisajes, playas y calles de la isla blanca que aparecen en este film, como el barrio de La Marina, la ciudad amurallada de Dalt Vila, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, o el Paseo Marítimo de Santa Eulària des Riu, perfecto para ser recorrido bajo la luz de la luna.