Hay un lugar donde se puede tocar el cielo de Ibiza: la cima de Sa Talaia, en Sant Josep. Con una altura de 475 metros, algo más que el Empire Estate, es el punto más elevado de la isla. En días claros en el que uno necesita oxigenarse y respirar aire puro no hay nada mejor que subir hasta arriba a pie y disfrutar de una de las mejores panorámicas de 360º de las Islas Pitiusas.
Se puede acceder al camino que lleva hasta Sa Talaia desde varias rutas, una de ellas se puede hacer andando a través de un camino que sale desde el pueblo o bien se puede seguir en coche la carretera hacia Cala d’Hort donde se encuentra un camino de tierra a la izquierda que lleva hacia allí.
En la cima se puede saborear el espeso silencio que sabe a musgo, pino y mar. Se mire por donde se mire, las vistas son impresionantes. Desde aquí se divisa la bahía de Portmany, el característico Cap Nonó, Sa Conillera y los islotes de Poniente a nuestros pies. Por el otro extremo se alcanza la mitad sur de la isla de Ibiza y la isla de Formentera. En días muy claros incluso se llega a ver la costa de Valencia.
Esta excursión se puede realizar tanto en verano, cuando se disfruta de un buen clima y días claros, como en invierno, que, con suerte, se puede llegar a ver el pico nevado.